Damian saltaba por los techos, Jonathan volaba a su lado, aunque había insistido en cargarlo, Damian lo rechazó.
Finalmente llegaron a la casa de Jonathan y entraron por la ventana.
-Con cinco segundos de sobra, nada mal -Sonrió Lois y dejó el teléfono a un lado.
-Bien, ya entregué al bebé, me voy -Se dió la vuelta.
-Quedate -Lo detuvo de la capa.
-No -Se zafó.
-Por favor -Hizo ojitos de cachorro.
-No -Le dió la espalda.
-Hay licuado de chocolate...
-. . .
★★★
-TT, no sé cómo me convences de estás cosas... -Dijo Damian con pijama y tomando el licuado.
No era la primera vez que Damian se quedaba a dormir de imprevisto, por lo que había atinado a dejar una pijama en la casa de los Kent cansado de tomar prestada la de Jon.
-Porque te conozco bien, es mi trabajo como Super amigo -Sonrió alegremente Jon.
-TT, tu y tus estúpidos conceptos, todo te lo inventas
-No es cierto, la promesa kriptoniana es real
-Y no debe tomarse a juego -Clark llegó a la casa -.Hola, Damian
-Hola, señor Kent -Siguió tomando su licuado de chocolate. Clark y Damian tuvieron un pequeño duelo de miradas durante unos instantes antes de que Clark se centrara en el pequeño Alfa.
-Lamento no haber podido celebrar tu cumpleaños, compañero... -Clark acarició la cabeza de Jon {1 de mayo}
-No te preocupes, papá, sé que hay cosas importantes... -Lo primero lo dijo decaído y pero luego miró a Damian y sonrió -.Pero pasé todo el día con Damian, eso lo compensa
-No me metas, Superlloron
-Entiendo... -Dijo Clark dedicándole una última mirada a Damian.
-Bueno, feliz cumpleaños Jon -Su madre llegó con una caja de regalo que Jon abrió con emoción en la sala, Damian le dió un último trago a su vaso y fue a observar.
Era una nueva capa, pues la suya ya estaba desgastada, Jon se la puso de inmediato y sonrió alegremente.
Clark miró a Damian quien estaba recargado del borde de la entrada a la sala.
«¿Y tu que traes?» Parecía que le preguntaba.
«Mi presencia es suficiente» Damian se cruzó de brazos.
-¡Mira Dami! -Jonathan derribó a Damian como ya se le había hecho costumbre.
Clark sonrió, estaba de acuerdo con la expresión de Damian, a Jonathan le bastaba su presencia.
-TT, bien, ya no tienes una capa de un niño de tres años... -Jonathan sonrió ante su comentario -.Ahora tienes una de un niño de cuatro años
-¡Oye! -Jon se cruzó de brazos y Damian soltó una carcajada
-Muy bien, creo que ya es hora de dormir
-¿Una hora más por ser mi cumpleaños?
-Cállate, obedece a tu mamá o dejaras de crecer
-¡Oye!
-Eso es cierto -Apoyó Clark.
★★★
Después de unos ligeros estira y afloja los niños se fueron a la habitación de Jon, el pequeño kriptoniano apenas había cerrado los ojos cuando Damian lo sacudió.
-¿Dami? -Jon se incorporó y vió un pequeño pastelito con una vela frente a él.
-Sopla o lo que sea... -Le tendió el pastel -.No esperes que cante
-Oh, déjame pedir un deseo -Cerró los ojos unos momentos antes de soplar la vela.
-¿Qué pediste?
-No puedo decirlo o no se hará realidad -Sonrió y partió el pastelito a la mitad para darle a Damian, este lo aceptó y se sentó a su lado para comerlo.
-TT, que infantil... Oh, una cosa más... -Sacó una caja debajo de la cama y se la entregó.
-¿Guardas cosas debajo de mi cama?
-Tal vez... -Sonrió landinamente, Jonathan supo que jamás volvería a mirar debajo de su cama.
Jon abrió la caja y soltó un ligero grito de felicidad, rápidamente se lo probó mientras gritaba al cielo, esto despertó a sus padres quienes entraron de sopetón a la habitación para ver a Jonathan probándose varias camisetas.
-Jonathan, son la misma, no tienes que probarte tod- Damian fue derribado.
-Mira, Dami, si me queda -Sonrió alegremente.
Damian suspiró al mismo tiempo que los padres de Jon mientras lo miraban tan alegre.
-TT... -Lo abrazó aferrándose a él -.Feliz cumpleaños, idiota...
-Gracias, Dami -El pequeño también lo abrazó con fuerza.
Ambos se aferraron el uno al otro, como si le gritaran al destino que no los separara. Los padres sonrieron y después de calmar al pequeño Jon, se fueron a dormir.
Oh, si el destino escuchara...
