Damian estaba de brazos cruzados en el asiento de atrás del Batimóvil junto a Tim.
-Vamos Damian, quita esa cara, vamos a una misión en familia -Dijo Dick desde el volante, Jason estaba de copiloto.
-Enano, ¿Si sabes sonreír? -Dijo Jason mientras se giraba sobre su asiento para mirarlo.
-¿Si sabes cerrar la boca? -Damian le gruñó -.Y tu Nithwing, ¡Nombres!
-Robin... -Tim le puso una mano en el hombro, Damian chasqueó la lengua y se cruzó de brazos nuevamente, pero se calló.
-Aún no puedo creer que ustedes dos se lleven bien -Observó Nithwing quien los veía por el retrovisor.
-Eso es porque tiene más cerebro que ustedes dos -Damian miró por la ventana e ignoró cualquier otra cosa.
Dick miró a Damian por el retrovisor y soltó un suspiro, no dijo nada, pero él sí lo notó, esperaba que solo fuera su imaginación.
★★★
En una fábrica de juguetes abandonada a las afueras de la ciudad, en una pared relativamente polvorienta, se encondia un elevador que llevaba a sus raíces.
Raíces que una congregación de tráfico de armas aprovechó para nutrirse y hacer sus sucios negocios. Sin embargo, ningún negocio de este calibre permanecía libre de la batifamilia mucho tiempo.
-Esta enfriando -Comentó un guardia a su compañero mientras soplaba sus manos para calentarlas.
-Estamos en mediados de noviembre, era obvio que iba a enfriar...
-Despues de nuestro turno, vamos por un café
-Seguro
-Inviten -Dijo Tim antes de dejarlos noqueados.
-Tu ya no debes tomar café -Nightwing de cruzó de brazos.
-Una taza no mata a nadie -Rodó los ojos Red Robin, Red Hood negó con la cabeza antes de contar hasta tres y patear la puerta para abrirla.
-¡Hola, hijos de perra! -Jason empezó a soltar disparos certeros.
-Espero que sean las balas de goma -Dick miró a Jason mientras se iba a cubrir con sus hermanos.
-Son las balas de goma -Respondió Damian.
-¿Cómo sabes? -Tim lo miró.
-Por el ruido que hacen al colisionar -Escucharon un ruido y miraron hacia arriba, un sujeto apuntó su arma hacia ellos.
Ellos se dispersaron, Damian tomó impulso y pateó al hombre en la nariz, aterrizó sobre él y fue cuando se dió que todos se habían quedado quietos, como si se dieran cuenta de algo.
-Miren lo que tenemos aquí... -gruñó con una sonrisa burlona -.Un omega y chiquillo, además... -Uno de los grandulones se rió y se acercó.
Damian no tenía idea como habían podido saberlo, pudo ser información filtrada o tal vez su peor pesadilla.
Los demás hombres rieron, acercándose como hienas. Damian se tensó, sacando su espada sin pestañear.
-Den un paso más y los parto en dos -Damian se concentró y entonces lo percibió. Su aroma finalmente se había despertado.
-¿Un omega jugando a depredador? -se burló otro Alfa, avanzando como si estuviera cazando una presa -.Veamos si muerdes o solo sabes temblar
Damian no perdió tiempo, se disparó hacia él, esquivaba las balas, todos volvieron a moverse. Golpeó las costillas del hombre, este apenas y reaccionó. El tipo lo tomó de los hombros y Damian aprovechó para golpear su mandíbula con una patada.
Siguió con los que vinieron, rápido, letal, su katana los desarmaba en el aire antes de hacerlos caer. Pero en un segundo, uno de los Alfas lo sujetó del brazo y lo empujó contra la pared, con una sonrisa cruel.
-Sabes lo que eres, mocoso -Dijo olfateando el aroma de Damian que aún no estaba bien definido -.Puedes jugar al guerrero, pero tarde o temprano tu cuerpo hablará más fuerte...
El Alfa no alcanzó a decir más. Jason lo agarró del cuello y lo estampó contra el suelo poniendo una pistola en su sien.
-Atrévete a volver a tocarlo, vamos, atrévete -Más Alfas empezaron a acercarse a pesar de la amenaza de Jason.
Tim bajó del estante a dónde se había trepado para esquivar las balas anteriormente, colocándose cerca de Damian y con el bastón bō en mano.
-Estrategia simple -dijo fríamente -.El primero que lo mire raro, le quiebro las piernas -Giró su bastón sobre su muñeca y luego lo clavó firme contra el suelo para enfatizar su punto.
Los Alfas se lanzaron, Damian chasqueó la lengua y se defendió con furia, sus hermanos le cubrían la espalda.
-No necesito que me protejan -Mencionó Damian mientras golpeaba a un tipo con el mango de su katana.
-Somos un equipo Robin... -Nightwing agarró a Damian de los hombros y lo obligó a agacharse para esquivar una bala -.Somos tus hermanos... No te protegemos porque seas débil... Sino porque es lo que los hermanos hacen, se cubren las espaldas
-TT -Damian miró a otro lado, una bala los separó, Damian volvió a la pelea -Vamos... -Se rió antes de romperle la nariz a uno -.¿Para esto ladraban?
Los pocos que quedaban parecían haberse molestado con su comentario, pues empezaron a atacar con más fuerza. Damian era bueno, demostraba ser digno de ser el nieto de La Cabeza Del Demonio.
Sin embargo, un Alfa le llegó por la espalda, aunque Damian logró esquivar su ataque, no pudo evitar ser derribado.
-Maldito mocoso
-Te apesta el aliento -Le escupió a la cara. El Alfa se enfadó más, pero no pudo tocarle ni un pelo.
-Aleja tus sucias manos de él o no va a quedar nada de ti para recoger -Nightwing tenía firmemente sujeto uno de sus bastones contra el cuello del rufián. Finalmente chasqueó la lengua y lo dejó inconsciente.
Cuando todo terminó, Jason limpió la sangre de sus nudillos y miró a Damian.
-Mocoso o no, omega o no... quien intente tocarte me lo cargo -Enfundó sus pistolas.
-Puedo solo -Damian se cruzó de brazos.
-Sí, quisiera ver la cara del idiota de su jefe al ver qué un Omega barrió el piso con sus hombres
Tal vez fue el aroma metálico de la sangre, tal vez fue la adrenalina, tal vez él sentimiento de desprecio achicándose. Pero Damian finalmente formó un vínculo de hermandad con Dick y Jason.
Ahora Damian tenía a sus hermanos, tenía a su familia completa.